Por: Dimas Romero González
Después de tres días, las comunidades antorchistas que sostenían un plantón frente a la Secretaría General de Gobierno, se retiraron con el compromiso firmado de solución inmediata a sus legítimas demandas. Así como pasó inadvertida su llegada a Ciudad Administrativa, su retiro, apenas mereció unos cuantos comentarios de algunos portales de internet.
Pero hagamos un recuento de los hechos, para efectos de informar a la opinión pública acerca de estas comunidades, la legitimidad de su lucha y el importante papel que ha jugado el Movimiento Antorchista con su tesonero papel de concientización de estos humildes oaxaqueños, que han aprendido a conducir sus peticiones dentro del marco legal de nuestra sociedad, con la fuerza de su unión, con la que, ante la negativa de las autoridades, exigen como lo hicieron en esta ocasión, hasta obtener la solución a sus demandas.
San Miguel Monteverde, perteneciente al municipio de San Antonino Monteverde, del distrito de San Pedro y San Pablo Teposcolula, en la Región de la Mixteca, se fundó hace 32 años, ante la petición de habitantes que estaban dispersos en la agreste orografía de la zona y que necesitaban agua potable, electrificación y demás obras y servicios, cuya obtención era imposible por la dispersión mencionada. Ante ello y por propuesta nuestra, se creó un asentamiento nuevo, difícil proceso que implicó convencer a los habitantes de dejar sus pequeñas parcelas y sus hogares. Hubo que dinamitar las rocas en el suelo para la introducción del drenaje, pero poco a poco fue tomando forma el centro poblacional, hasta llegar a contar con mejor infraestructura que la cabecera municipal misma, a pesar de contar con apenas 5000 mil habitantes. La comunidad que ha venido creciendo, ha estado solicitando su escuela preparatoria desde hace cinco años, como parte del proyecto general, que incluye una casa de cultura, una unidad deportiva integral, un proyecto ecoturístico y proyectos productivos para generar empleos. En todo este proceso, según sus Usos y Costumbres, la comunidad reconoce y hace suyo el planteamiento teórico del Movimiento Antorchista, de enseñar al pueblo pobre a regir su propio destino, asumiendo el papel de dirigentes, instituyendo una dirigencia antorchista colectiva y nativa de su propia comunidad, vigilada por la asamblea comunal como la máxima autoridad. Y esta perfecta comunión de ideales y objetivos entre el Movimiento Antorchista y sus miembros de Monteverde, ha dado como producto una comunidad ejemplar en todo el estado, reconocida por sus habitantes y por el gobierno mismo.
En cuanto a San Pedro Ocopetatillo, municipio enclavado en la Sierra Mazateca, en la Región de la Cañada, a donde llegó Antorcha hace 18 años, se ha observado un desarrollo sobresaliente, como ejemplo en toda la zona, con toda su infraestructura social completa, desde calles pavimentadas hasta sus escuelas con techados y canchas necesarias, una casa de salud, con la remodelación de su iglesia y la construcción en proceso de un mirador turístico, todo ello en una comunidad de no más de mil habitantes. Pues bien, hasta hace tiempo todo había sido tranquilidad y armonía, pero políticos de filiación morenista azuzaron a un grupo reducido de personas que violando toda norma electoral, en 2019, cuando se realizó la elección de presidente municipal, que evidentemente perdieron, presentaron una segunda acta de asamblea, firmada por el Comisariado de Bienes Comunales, haciendo votar a fallecidos y a menores de edad. La mayoría representada por el edil electo, demostró la ilegalidad de ese procedimiento, pero a pesar de ello, el Tribunal Electoral Estatal, argumentando que por existir un supuesto conflicto intercomunitario, no se podría llevar acabo la elección, finalmente, la Sala Xalapa del Tribunal Superior de la República, emitió el dictamen en 2020 para que se expidiera la convocatoria de una nueva elección. La SEGEGO por su parte y ante la falta de autoridad municipal, ha enviado hasta esta fecha, dos comisionados, violando a todas luces el derecho de los habitantes a elegir a su gobernante, pues la función única de esta figura administrativa, es convocar a una asamblea para realizar una nueva elección. En todo este proceso, y contrario a las medidas radicales y violentas que normalmente toman las comunidades que son impedidas a elegir a sus autoridades, los ocopetatillenses, gracias a la elevación política que han alcanzado por la influencia educativa del Movimiento Antorchista, nunca usaron la fuerza ni cayeron en provocaciones, a pesar de que los antorchistas son el grupo ampliamente mayoritario. Siempre siguieron el proceso legal y electoral, a pesar de que estuvo plagado de argucias y triquiñuelas de todo tipo.
Y estas son las comunidades que instalaron su plantón, una por estar esperando cinco años a que se oficialice la preparatoria que fundaron, cuyos maestros pagan ellos mismos y, la otra porque a poco más de dos años de haberse anulado la elección de su presidente municipal, seguía el bloqueo y la violación de su derecho de autodeterminación.
Para quien no tiene una mente prejuiciada y piensa con espíritu crítico, será obvio que estos ciudadanos no solo tienen derecho de exigir, sino que incluso se tardaron demasiado en hacerlo valer. Y por tanto, es también claro, que las autoridades no tenían ni tuvieron nunca, un argumento que demostrara que esto no debía atenderse. La realidad cayó pues por su propio peso, por lo que en 25 días, máximo, deberá normalizarse la situación de la escuela de Monteverde y el 28 de este mes, se realizará la elección a Presidente en Ocopetatillo. Estos pequeños triunfos demuestran que la lucha abnegada, honesta y tesonera de Antorcha da resultados, al final de las cuentas. Y esos triunfos son los que se llevan los antorchistas.
Por lo tanto, por más ataques y calumnias que se viertan sobre nosotros, los antorchistas no solo existimos incólumes, sino que cada vez más mexicanos humildes se convencen que el camino que Antorcha propone para la solución de los problemas y carencias de los pobres, es el único camino posible.
Invito por tanto a quienes no se han animado a acercarse a nosotros, a que lo hagan, porque por los antorchistas hablan los resultados. Mientras la 4T se derrumba, Antorcha se fortalece y tarde o temprano, la historia nos dará la razón.