De la Redacción
Oaxaca, Oax.-Padres de familia y personal docente del Centro de Iniciación Musical de Oaxaca (CIMO), aseguraron que desde hace varios años, esta institución se encuentra en una crisis administrativa, financiera y de mantenimiento. «Urge rescatar y dignificar a una de las instituciones de enseñanza musical más importantes en el estado, que ha formado por más de 34 años a generaciones de niñas y niños y aportado activamente al legado cultural de Oaxaca», indicaron.
En un pronunciamiento dirigido a la comunidad artística y musical, así como a la sociedad y egresados del CIMO, señalaron que ante esa situación se han constituido legalmente como Comité de Padres de Familia». Ello, «para levantar la voz e iniciar una serie de acciones encaminadas hacia la legitimidad, reconocimiento y legalidad de ese Centro de formación musical».
Indicaron que el pasado 24 de mayo de manera informal se convocó a un grupo de profesores a presentarse en las oficinas de la Secretaria de las Culturas y las Artes de Oaxaca (SECULTA), en donde fueron amenazados por la Contadora Ana Llaveros, junto con José Cruz Medina Lopez y Feliciano Marin Valdivieso.
Dijeron que «no podían percibir un sueldo doble, ya que, además de impartir clases en el CIMO, forman parte de la Orquesta Sinfónica de Oaxaca, la Orquesta Primavera de Oaxaca y la Banda de Música del Estado de Oaxaca. Por lo tanto, debían «escoger» entre la actividad docente en el CIMO o de ejecutante en alguna de las agrupaciones mencionadas.
Incluso, indicaron, debían de regresar el dinero que se les ha pagado desde enero a la fecha, lo cual «es un atropello, un abuso y una falta de respeto, ya que ser ejecutante y docente del CIMO, son dos tipos de actividades y trabajos diferentes que en ningún momento se contraponen». «Además, considerando que el personal docente recibe por hora de enseñanza la cantidad de $ 53.40 pesos, menos una retención justificada por un concepto de honorarios asimilables a salario, quedando en aproximadamente 47 pesos la hora, lo cual es indigno y bajo en relación a la preparación del profesorado, quienes por necesidad aceptan dichas condiciones, incluso bajo amenazas y hostigamiento».
«Peor aún, estas percepciones por la labor de los profesores en el CIMO es enunciada como ayuda económica, y son ellos los que deben gestionar la solicitud del pago de las horas ya laboradas y siempre se les ha pagado sin contratiempos, sin que antes se les hubiera señalado que hay alguna anomalía administrativa». «En todo caso, es responsabilidad de la SECULTA y sus áreas competentes, incluso es la Contadora Ana Llaveros, la misma persona que en los últimos años ha autorizado dicha compensación», agregaron.
En el documento, señalan que las clases que se imparten a niñas y niños son bajo condiciones indignantes, teniendo que suspender actividades constantemente ante lo insalubre de asistir a las instalaciones debido a la falta de agua en los baños, las goteras en los salones y la falta de mantenimiento a los instrumentos, así como otros insumos necesarios para quienes asisten a esa institución.
Citlalli Toledo Sanchez, una de las madres de familia, expresó que de continuar esa situación, 13 profesores estarían dando de baja, lo que representa el 50 por ciento de la plantilla docente, situación que no permitirán. Por ello, indica el documento, solicitan la intervención del gobernador del estado, Salomón Jara Cruz, para que se instale una mesa de atención para atender sus planteamientos.
Los padres de familia demandan que se dignificar el pago por hora de enseñanza, se revise la entidad jurídica, administrativa y financiera del CIMO, para poder darle certeza a esa institución. Que se le dé mantenimiento a las instalaciones y se brinden los insumos básicos, asimismo se lleve a cabo una auditoria exhaustiva para conocer con claridad los recursos destinados al CIMO y con qué modalidad o figura legal se manejan ya que como padres de familia también pagan una cuota de inscripción.
Demandaron que no haya represalias en contra de ningún docente o personal administrativo. ya que a partir de las acciones que han emprendido, personal de la SECULTA ha amedrentar, intimidado, hostigado a los profesores para que desistan de exigir lo que por derecho legítimo y constitucional les corresponde.
Puntualizaron que sus demandas no tienen tintes políticos ni algún otro interés excepto el bien común del futuro y bienestar de sus hijos.